«Un álbum realmente grande es contexto, contenido y un rastro de polvo de hadas mágico», dijo una vez Jac Holzman, «Lo sabes cuando lo oyes, y cuando lo oyes, ésa es la emoción».

Como fundador de Elektra Records y una de las mentes más agudas de la historia de la industria musical, Holzman es una de las raras personas con una perspectiva profunda e informada sobre los tres elementos que ha mencionado. Con grupos como Love y los Doors, Elektra no sólo ayudó a definir los años sesenta, sino que ofreció una visión de esa época sísmica que hizo estallar los clichés que se han llegado a asociar con ella.

Aún más profundamente, aunque de forma mucho menos obvia, toda la música folk e internacional que Elektra publicó en los años cincuenta fomentó y dio forma a la conciencia cultural que permitió que naciera y floreciera lo que consideramos los años sesenta. «La independencia es un estado de ánimo», ha dicho Holzman. «Tienes que grabar algo porque crees que merece la pena. La idea es no dejarse cohibir por los números, asumir riesgos y encontrar cosas en las que creer.»